Coulant de chocolate
160g de chocolate negro 70% cacao
120 g de mantequilla + 10g para los moldes
100 g de azúcar +20 g para los moldes
4 huevos
40 g de harina
Precalentamos el horno a 220ºC. Untamos con mantequilla y azúcar los moldes (de 8 a 10 cm. de diámetro aproximadamente)
Derretimos el chocolate troceado con la mantequilla en una cacerola a fuego muy lento.
Aparte batimos los huevos con el azúcar y añadimos a la mezcla anterior.
Tamizamos la harina y lo mezclamos todos removiendo un poco.
Vertemos en los moldes y horneamos durante 6 minutos.
Derretimos el chocolate troceado con la mantequilla en una cacerola a fuego muy lento.
Aparte batimos los huevos con el azúcar y añadimos a la mezcla anterior.
Tamizamos la harina y lo mezclamos todos removiendo un poco.
Vertemos en los moldes y horneamos durante 6 minutos.
En un pequeño pueblo de Francia llamado Lansquenet aparece una misteriosa mujer para abrir una bombonería donde vende maravillosos dulces que hace ella misma. Vianne Rocher provoca en este lugar una verdadera revolución: reaparecen amores de la juventud, los impertinentes se transforman en seres felices y los matrimonios se arreglan. Aparecen ciertas ideas enfrentadas: la lucha entre la pasión y la moral, entre la tradición y el cambio.
También es un canto a la vida, a disfrutar de los placeres, a sumergirse en las tentaciones teniendo en cuenta los peligros que puede provocar la intolerancia y las prohibiciones, así como no dejar a los demás vivir su vida.
También es un canto a la vida, a disfrutar de los placeres, a sumergirse en las tentaciones teniendo en cuenta los peligros que puede provocar la intolerancia y las prohibiciones, así como no dejar a los demás vivir su vida.
Hablamos de una película estrenada en el año 2000 dirigida por Lasse Halström y protagonizada por la dulce y encantadora Juliette Binoche junto con Johnny Depp y Judi Dench entre otros. Está basada en una novela (menos conocida que la película) de Joanne Harris donde el chocolate ejerce como alimento totalmente tentador y, por otro lado, como un reconfortante maravilloso; una dualidad más.
Simplemente me apetecía hacer chocolate, necesitaba abandonarme en un reparador y reconstituyente dulce de chocolate porque la vida está llena de belleza y seducciones; ¡¡¡disfrutemos de ella!!!
A ver si la próxima vez me salen tan bien como a ti, tengo que cogerles el punto. La película es una maravilla, como el chocolate mismo.
ResponderEliminarBisous
Se dice que Voltaire se alimentaba sólo de chocolate durante algunas temporadas. Lo mejor es, sin embargo, disfrutar de la vida y su receta me ayudará. Gracias.
ResponderEliminarAy, madre, qué pinta. ¿por qué en este mundo todo lo delicioso lleva huevo?
ResponderEliminar¿has visto Deliciosa Martha? Creo que te gustaría.
Un beso!
¡me encantan! te han salido con una pinta estupenda!!
ResponderEliminarbesos
Precioso post! Me acostaré con una sonrisa. Gracias.
ResponderEliminarQue coulant tan divino, me encanta!!!una fotografía muy apetecible ;)
ResponderEliminarMuy recurrente siempre el chocolate, y muy cinematográfico.Un saludo.
ResponderEliminarA Elena: seguro que si
ResponderEliminarA Anónimo: que listo Voltaire!
A Donibaneko:el chocolate me encanta
A Gema: es verdad, intentaremos buscar uno sin huevo. LA he visto, en otra ocasión hablo de ella.
A Antonia: Gracias
A Mónica: me alegro
A Fresaypimienta: Gracias
A Nacho: ya sabes, siempre chocolate.
Muchas gracias a todos, me hacen mucha ilusión vuestros comentarios. Un beso